Nuevo horizonte para el creyente
La entrada en el nuevo año alienta a la comunidad cristiana a extender su mirada de fe hacia nuevos horizontes en el anuncio del Reino de Dios. Es obligado, en esta circunstancia especial, volver con una renovada fidelidad a las enseñanzas del Concilio Vaticano II, que ha dado nueva luz a la tarea misionera de la Iglesia ante las exigencias actuales de la evangelización.
Hoy la Iglesia ha tomado conciencia más viva de su propio misterio y de la misión apostólica que le encomendó el Señor.
Esta conciencia compromete a la comunidad de los creyentes a vivir en el mundo sabiendo que han de ser «fermento y el alma de la sociedad humana, que debe ser renovada en Cristo y transformada en familia de Dios.
Mons. Salvador Cisneros
Parroquia Santa Teresa de Ávila