Benedicto XVI visita México en 2012
*Reflexiones del Papa a Obispos Mexicanos en 2005.*
El próximo viernes 23 de marzo llega a México el Santo Padre Benedicto XVI y no sabemos aún exactamente qué es lo que nos viene a decir, o cuales temas va a tratar detalladamente, pero sí conocemos lo que ya ha dicho a los mexicanos anteriormente, sobre todo en una ocasión muy especial que quedó grabado en los corazones de los obispos de nuestro país cuando fueron a visitar al santo Padre.
Presento aquí sólo tres pensamientos, cuando allá en el año 2005, en Castel Gandolfo, un pueblito cerca de la ciudad de Roma, el recién elegido PAPA Benedicto XVI, decía a los obispos mexicanos en la Visita “Ad limina”, (osea en la visita oficial y obligatoria que tienen que hacer todos los obispos del Mundo para entregar, periódicamente, un reporte de trabajo pastoral al Papa como una forma de comunión con su Santidad) : Qué “México es un país Pluri-cultural en transición, y la riqueza del acontecimiento guadalupano ha unido en una realidad nueva a personas y culturas diferentes, a través de las cuales México ha ido madurando su propia identidad”. Lo cual es profundamente cierto. El evento guadalupano ha provocado el nacimiento de un pueblo nuevo, seamos católicos o no. Es verdad.
Comentó también en aquella ocasión que es un grave error de los católicos, cuando muchos bautizados, influenciados por innumerables propuestas de pensamiento y de costumbres, son indiferentes a los valores del Evangelio, y aún creyéndose católicos viven de hecho alejados de la fe abandonando las prácticas religiosas. En esto el santo Padre, digo yo, toca unos de los temas más trágicos de los mexicanos, que siendo un país mayoritariamente católico, vivamos en un ambiente tan impune, tan violento y tan intolerante, lo cual está en contra de los valores evangélicos. ¡Qué triste que seamos muy guadalupanos pero profundamente corruptos!
Subrayó el Papa, además, en aquel tiempo a los Obispos, pero dirigido a lodos los mexicanos, que debemos hacer un gran esfuerzo para explicar adecuadamente los motivos de las posiciones de la Iglesia, subrayando que no se trata de imponer a los no creyentes una perspectiva de fe, sino de interpretar y defender los valores radicados en la naturaleza misma del ser humano. O sea que Cristo no nos viene a quitar nada, sino a darse a sí mismo y elevarnos como seres humanos.
Seguramente no puedo resumir aquí todas las reflexiones que el Papa ya ha hecho sobre México, pero sí les puedo decir con seguridad que el mensaje del Papa este fin de semana será concretamente pastoral y espiritual, no político en el sentido partidista.
Pbro. Jorge Echegoyén Flores
Subdirector del Proyecto de la Nueva Catedral