El Arzobispo celebró su 50 aniversario sacerdotal
Tijuana.- La Arquidiócesis de Tijuana está gozosa por la celebración del 50 aniversario de ministerio sacerdotal del Arzobispo Metropolitano, Don Rafael Romo Muñoz, por lo cual se organizaron diversas celebraciones y eventos donde la comunidad católica se reunió en torno a su Obispo por este importante acontecimiento.
El viernes 27 de noviembre se llevó a cabo la Misa de Acción de Gracias, donde el Arzobispo estuvo acompañado por el Nuncio Apostólico, Mons. Christhope Pierre, y 26 arzobispos y obispos, los sacerdotes de la Arquidiócesis de Tijuana, las religiosas y fieles católicos en el Auditorio de Tijuana a las 5:30 p.m. en el Auditorio de Tijuana.
Así como el Presidente Municipal de Tijuana, Dr. Jorge Astiazarán Orcí y su esposa la Sra. Elia Manjarréz de Astiazarán.
El Nuncio Apostólico leyó una felicitación de parte del Papa Francisco a Mons. Romo Muñoz por su 50 aniversario sacerdotal: “Te felicitamos cordialmente recordando el quincuagésimo aniversario de tu Ordenación Presbiteral que felizmente se cumplirá el día veintiocho del próximo mes de noviembre y con mucho gusto te impartimos nuestra Apostólica Bendición, como auspicio de la gracia celestial. Francisco Papa”.
Por su parte el Arzobispo comentó al final de la eucaristía que “todo este sentir en el que Dios nos considera en la óptica de la consagración a él: ´desde el seno materno te conocí, antes de que nacieras´ etcétera. Bueno esto es de alguna manera, creo yo, la historia de la ordenación de la vocación de cada uno de nosotros porque siempre está de por medio la mamá. En el seno materno donde nos fuimos gestando, y después el acompañamiento de la misma mamá y la familia con la que se va de alguna manera dibujando la vocación de uno”.
Y añadió: “Es muy impactante el hecho de que la palabra de Dios nos diga ´yo te escogí y te consagré desde el seno materno´. El amor eterno con que Dios nos ha elegido. Pues indudablemente es una predilección, eso lo debemos tomar. Yo siempre recuerdo con mucho cariño aquellas palabras del Obispo Don Fernando Romo (q.e.p.d.), quien me recibió como chamaco en el seminario siendo él rector y después se hace diócesis Torreón y a él lo nombran obispo, y continúa después mi formación ya como obispo, y él decía una expresión muy suya: ´la mamá del sacerdote jamás se va a condenar. La mamá del sacerdote se salva…”.
Además enfatizó: “Nosotros somos definitivamente servidores del amor de Dios. Una de mis expresiones de oración personal todos los días le digo a Nuestro Señor: “Has de mi corazón un horno ardiente de tu amor”.
También agradeció la presencia de los seminaristas y pidió al Señor, e invitó a todos a hacerlo, de pedir por la abundancia de vocaciones en todos los campos: sacerdotal, religiosa, contemplativa, misionera y de laicos comprometidos. Y agradeció la oración que hacen por él. E invitó a amar más a nuestra Iglesia y hacer nuestra su causa.
E hizo referencia a la carta de renuncia que presentó al Papa Francisco, por la edad de 75 años en la cual deben presentarla los obispos.