El Arzobispo invita a los fieles a participar en el Diezmo
El próximo domingo 29 de noviembre, primero de Adviento, se llevará a cabo en todas las 94 parroquias de la Arquidiócesis de Tijuana, incluyendo las capillas, el Diezmo 2009, recursos con que la Iglesia local sigue apoyando los proyectos diocesanos como son la evangelización, la adquisición de terrenos para la construcción de nuevas parroquias, la especialización de sacerdotes, la atención a los ancianitos, los enfermos, los niños, etcétera. “El diezmo viene siendo aquella aportación moralmente obligatoria de todos los creyentes para su Iglesia, en este caso nosotros como católicos. Es una necesidad muy grande…Sabemos que Dios no se deja ganar en generosidad, entonces esperamos que todos podamos responder con alegría”, comentó el Excelentísimo Señor Arzobispo Metropolitano, Don Rafael Romo Muñoz. Explicó que las ofrendas que los fieles aportan cada semana son para apoyar a sus sacerdotes, a sus parroquias o capillas en sus gastos administrativos, operativos, de atención, etcétera. Pero a nivel diocesano se requiere de un ingreso económico, y en un paralelismo lo comparó con los impuestos, que son aportados por los ciudadanos para una mejor posibilidad de servicios y administración de los diferentes niveles de gobierno. “Igualmente en la Iglesia eso significa el diezmo, que sintiendo esa responsabilidad de que somos Iglesia y que la Iglesia, ayer lo veíamos tan estupendamente en la liturgia cuando Pilato asombrado ante Jesús le dice: ´Tú eres rey´ y Jesús le dice: ´Sí, pero mi reino no es de este mundo´. Entonces todo lo que significa la necesidad de conducirnos a la salvación, que no es de este mundo, requiere también de todo un movimiento de auxilio económico”, destacó el Arzobispo. Detalló que la Iglesia diocesano un día al año pide el apoyo económico de sus fieles católicos, y aunque la mayor recepción de sobres con el diezmo se llevará a cabo este domingo 29, las personas tendrán la oportunidad de entregarlo hasta finales del mes de enero del siguiente año. Las opciones que tienen los católicos es que quienes reciben un salario mínimo puedan dar según sus posibilidades económicas, quienes perciben un salario mayor al mínimo puedan ofrendar lo equivalente a un día de salario anual y quienes tienes mayor posibilidad puedan dar el 1 por ciento de sus ganancias.