Matrimonio, salud y profesiones
Una colección de ensayos, publicada en Estados Unidos con el título «Matrimonio, salud y profesiones», contiene numerosos estudios que muestran las ventajas del matrimonio. En un ensayo, Linda J. Waite defendía que estar casados mejora la salud física y psíquica y alarga la vida.También afirmaba que cohabitar sin estar casados no proporciona las mismas ventajas, puesto que las parejas, con frecuencia, continúan enganchadas a prácticas malsanas, como el abuso de drogas y alcohol. Observaba: «Sentir que uno es querido y cuidado mejora el bienestar emocional, disminuyendo la depresión y la ansiedad, y fomentando recursos psicológicos tales como la autoestima, el dominio y la confianza».Los datos de una encuesta Australiana sobre 10.600 adultos muestran que las mujeres con menos problemas mentales de salud están casadas, trabajando y criando a los hijos. La investigación cubría la depresión, desórdenes bipolares, manías, desórdenes de ansiedad, abuso de drogas y alcohol. Las mujeres casadas sin hijos que trabajan tienen un 14% de probabilidades de tener uno de estos problemas, mientras que las mujeres casadas con trabajo e hijos tienen un 12%.En Inglaterra un grupo de funcionarios de registros civiles y de líderes de iglesias ha firmado en la ciudad de Bath un acuerdo denominado «Política Comunitaria por el Matrimonio».El documento contiene los siguientes puntos: El matrimonio no es sólo una opción por una forma de vida. Debe valorarse públicamente porque a las familias les va mejor en hogares unidos. El matrimonio es algo que se puede aprender. Por tanto, debe promoverse y hacer accesible la educación sobre el matrimonio y las relaciones.Apoyo a las necesidades del matrimonio. Las parejas casadas experimentadas serán entrenadas como formadoras de aquellas parejas que comienzan. Los firmantes pidieron un mayor apoyo del gobierno para ayudar a los matrimonios a permanecer juntos. «El estado gasta millones de dólares para tratar los fracasos de los matrimonios rotos y casi nada para intentar conservar a las familias unidas».
Mons. Salvador Cisneros G.
Parroquia Santa Teresa de Ávila