RECORRIENDO LA MARCHA-PEREGRINACIÓN CON LOS MENSAJES QUE NUESTRO ARZOBISPO FRANCISCO, NOS HA COMPARTIDO A TRAVÉS DE ESTOS AÑOS

Pastoral para la Comunicación. – Durante estos años de su servicio episcopal en su querida Arquidiócesis de Tijuana, nuestro Arzobispo Metropolitano Don Francisco Moreno Barrón, nos ha compartido y exhortado a encontrar en esta expresión de nuestra Iglesia Católica una inspiración y compromiso que contribuya al bien y progreso de nuestra comunidad social y eclesial. A continuación, compartimos algunos extractos de sus mensajes en el contexto de las anteriores Marchas-Peregrinación de los años 2017 al 2023. 

Año 2017: XVII Marcha-Peregrinación: “Unidos en la Misericordia, Tijuana rostro de Migrante”

“Este acontecimiento anual es un aporte a la sociedad en que vivimos. La Iglesia no vive para sí misma. La Iglesia no tiene razón de ser cuando sólo está pensando para sí misma. La Iglesia vive para los demás y estamos llamados a colaborar, a construir una mejor sociedad de la cual nosotros formamos parte. Ya sabemos que hoy tenemos puntos rojos, situaciones difíciles que enfrentar en nuestra sociedad en el orden de la violencia, en el orden de los atentados a la vida, que recientemente se manifiestan”. 

“Como sociedad somos llamados a ser sensibles a la presencia de nuestros hermanos migrantes entre nosotros. Aquí palpamos el rostro de los migrantes porque esta frontera es la más transitada del mundo”.

“Siendo nosotros un pueblo migrante estamos más dispuestos, más sensibilizados para dar la mano a todos estos hermanos que pasan necesidad…De verdad que somos un pueblo migrante y este es un motivo de orgullo. No debemos avergonzarnos de nuestra identidad. Al contrario, Tijuana, Baja California es un pueblo migrante, una diócesis migrante y eso nos da una identidad y debemos de verlos como un privilegio”.

2018: XVIII Marcha Peregrinación: “Bienaventurados los que trabajan para la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios” (Mt.5,9)

“Somos llamados a valorar la vida como un don de Dios y a promover la vida humana desde su concepción hasta la muerte natural. Y al mismo tiempo estamos llamados a ser constructores de paz, no sólo en una marcha, no sólo con aclamaciones, sino en la vida cotidiana, en la relación con todas las personas que nos rodean”.

“La paz es una tarea y una responsabilidad de todos. Esta marcha es un aporte a la construcción de una nueva y mejor sociedad. Una sociedad donde basados en estos valores de la vida y de la paz encontremos los caminos del auténtico progreso para todos”.

“La paz no nos la va a imponer Dios a la fuerza ni tampoco nos la va a conceder con sólo pedirla, él quiere que seamos constructores de su paz, que colaboremos con él. Esta marcha quiere ser entonces como un compromiso que asumimos de ser constructores de paz, para que nuestra vida sea una vida auténtica en esta sociedad de la que formamos parte, y ya sabemos que para nosotros la vida es Jesús”.

2019: XIX Marcha-Peregrinación: “Quien defiende la vida, construye la paz”

“Proclamar la vida y la paz. La vida toda, es una presencia y expresión de Dios en medio de nosotros al mismo tiempo estamos convencidos de que quien trabaja y promueve la vida construye la paz, contribuye a la edificación de la paz en nuestra sociedad tan golpeada por distintas expresiones de violencia”.

“Estas expresiones tienen un sentido educativo para las familias y la sociedad. Es una llamada a vivir los auténticos valores de manera transversal en quienes conformamos la comunidad y la sociedad”.

“La Iglesia por ser una comunidad social tiene el compromiso de colaborar en la construcción de la Paz y ésta iniciativa de marchar por la Vida y la paz es un fermento en la masa, una expresión nuestra de fe’. No basta solamente con que digamos que queremos paz, es necesario orar y comprometernos por la paz”.  

“Quienes fomentan la violencia escuchen el clamor del pueblo que quiere paz, que escuchen este llamado al respeto de la persona humana, que ellos se valores así mismos y disfruten también con su familia los valores de la vida. ‘Pedimos a los grupos delictivos que abran su corazón a esta expresión social para que ellos se sensibilicen, para que, por su propio bien, el de sus familias y de nuestra sociedad depongan las armas, la violencia y sean también constructores de paz junto con nosotros’’.

2020: XX Marcha-Peregrinación: “La paz les dejo, mi paz les doy” Jn 14, 27

“Es importante darle el lugar que le corresponde a la familia para que siga dando su aporte en la construcción de la sociedad, ‘Destruyamos la familia y destruiremos a la sociedad’.

“Anhelamos en Tijuana y en Baja California vivir en Paz, estamos rodeados de muchas expresiones de violencia contra las personas, contra sus bienes y es necesario que la sociedad se exprese ante la sociedad y las mismas autoridades correspondientes de manera que juntos unamos esfuerzos para poder vivir en paz en nuestra sociedad”.

“Sin paz autentica, no hay progreso en las comunidades y los pueblos. Hago un llamado a toda la comunidad a edificar y contribuir a una mejor sociedad”.

2021: XXI Marcha-Peregrinación: “Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y toda tu familia” Hch 16, 31

“Centrado nuestra mirada en Cristo, somos llamados a ser constructores de paz en nuestra sociedad afectada por esta pandemia de Covid-19, a proclamar el evangelio de la vida, abrazar la familia y cuidar la salud”.

“Esta Marcha por la Vida y la Paz deseamos que sea ante todo una experiencia de encuentro con Cristo como discípulos y misioneros suyos que anuncian a Jesús a los demás”.

Caminar en esta expresión de amor es una experiencia de encuentro con Cristo, es una experiencia de Iglesia, de comunidad…Y que está comprometida en la transformación de las realidades temporales en esta sociedad promoviendo estos grandes valores de la vida y de la paz”.

2022: XXIII Marcha-Peregrinación: “Gloria a Dios en el Cielo y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad” Lc 2,14

“Quien ama la vida, construye la paz. Con una mirada luminosa anunciamos a Cristo Vivo y abrazamos la familia al tiempo que somos llamados a ser constructores de paz en nuestra comunidad social”

“Somos llamados a cultivar la cultura de la vida, proclamar los valores que nacen en el corazón del hombre y construyen el verdadero y auténtico bien de nuestra sociedad. Nuestras familias anhelan la construcción de la paz”.

2023: XXIII Marcha-Peregrinación: “Jesús estaba sujeto a sus padres y su madre guardaba todas estas cosas en su corazón” Lc 2,51

“La familia fuente de vida y camino para la paz, nos invita a ser discípulos, que vivamos nuestra fe en Jesucristo y, como sus misioneros, proclamemos los valores de la familia en el plan de Dios, la vida humana en medio de esta casa común que se nos ha confiado y la paz que tanto anhela nuestra sociedad”.

“Es una expresión viva de la sinodalidad, de ir caminando juntos y unidos, caminar en medio de nuestra comunidad es testimonio de nuestras convicciones”.

“La fe y amor a Dios, se manifiesta también en la experiencia de ser Iglesia, vivir más esa Iglesia de puertas abiertas, que se proyecta en un compromiso a favor de un ambiente de paz y de armonía para nuestras familias”.