El Arzobispo pide a todos los católicos oración por el Papa Francisco
El Arzobispo Metropolitano, Don Rafael Romo Muñoz, invita a todos los católicos y personas de buena voluntad a que oremos por el Santo Padre por los buenos frutos de su visita a nuestro país, y para que Nuestro Señor lo fortalezca durante su estancia entre nosotros.
“Vamos a acompañar al Santo Padre. Su servidor como todos los obispos tengo que estar ahí con ellos, el sentido de tengo va más allá porque en realidad es un deseo del corazón de poder estar con él, tal vez tendré la oportunidad de saludarlo y decirle, como tantos que al saludarme me han pedido salude al Papa de mi parte. Por supuesto que lo haré de parte de todos nosotros, de toda nuestra Arquidiócesis de Tijuana y de toda la Provincia Baja California”, dijo el Arzobispo.
Mencionó también que alrededor de mil 500 católicos de esta jurisdicción eclesiástica, entre sacerdotes, religiosas (os), feligreses, etc. estarán representando a la Arquidiócesis de Tijuana en los diferentes lugares donde estará el Santo Padre: Chiapas, Estado de México, Ciudad de México, Morelia y Ciudad Juárez.
“Es realmente de una importancia grande para nosotros. Y el Papa no es de ninguna manera una especie de objeto que viene como si fuera un catalizador para las relaciones entre la sociedad y el gobierno. Ese no es su objetivo. Su finalidad es netamente pastoral como un padre responsable del mundo católico, y por lo tanto con ese mismo espíritu con que se presenta en todas partes, se presentará también entre nosotros”, aclaró Mons. Romo Muñoz.
El Arzobispo hizo referencia a un video que el Papa Francisco envió a todos los mexicanos donde comparte sus sentimientos: “queridos hermanos cuando ya falta muy poco para mi viaje a México estoy contento, siento una gran alegría. Siempre tuve un lugar especial en mi corazón por todos los mexicanos. Los llevo dentro de mi corazón. Ahora podré visitarlos y pisar esa tierra bendita tan amada de Dios y tan querida de la Virgen María”.
Y confió uno de sus anhelos más grandes como lo es visitar la casa de la Virgen María, como un hijo más, a quien pondrá a sus pies todo lo que lleva en su corazón, entre otras cosas.