Domingo de la Palabra de Dios: “Su Palabra, como la carta de amor que escribió para nosotros”
Pastoral para la Comunicación.- El Papa Francisco que, con el Motu Proprio Aperuit Illis del 30 de septiembre de 2019, estableció que “el tercer domingo del tiempo ordinario se dedique a la celebración, reflexión y difusión de la Palabra de Dios” para “hacer crecer en el pueblo de Dios la familiaridad religiosa y asidua con las Sagradas Escrituras”.
Desde antes del Concilio Vaticano II (1962-65), el “Movimiento Bíblico” promovió su valoración entre los católicos, lo que se plasmó en la Constitución “Dei Verbum” del mismo Concilio. A partir de entonces, el estudio, la oración y la predicación de la Palabra de Dios se incentivó por todas partes. Hay muchísimas iniciativas al respecto en todo el mundo. A pesar de ello, todavía hay muchos católicos que, si tienen en casa un ejemplar de la Santa Biblia, como es el caso ya de la mayoría, nunca dedican tiempo a leerla y meditarla.
“Dedicar concretamente un domingo del Año litúrgico a la Palabra de Dios nos permite, sobre todo, hacer que la Iglesia reviva el gesto del Resucitado que abre también para nosotros el tesoro de su Palabra para que podamos anunciar por todo el mundo esta riqueza inagotable”, ha explicado el Papa Francisco.
En la Carta referente a este Domingo de la Palabra de Dios el Obispo de Roma ha expresado que “La Biblia no puede ser sólo patrimonio de algunos, y mucho menos una colección de libros para unos pocos privilegiados… La Biblia es el libro del pueblo del Señor que, al escucharlo, pasa de la dispersión y la división a la unidad. La Palabra de Dios une a los creyentes y los convierte en un solo pueblo… La Biblia no es una colección de libros de historia, ni de crónicas, sino que está totalmente dirigida a la salvación integral de la persona”.